Cómo potenciar el uso de las Fintech en América Latina

Las Fintech siguen revolucionando en el mundo la manera en cómo las personas se relacionan con las transacciones financieras, y América Latina no es la excepción.

Según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en su reporte “Fintech en América Latina y el Caribe”, a cierres del 2021 se identificaron un total de 2.482 empresas Fintech en Latinoamérica, representando el 22,6% de las más de 11.000 empresas Fintech que existen a nivel mundial. Esta tendencia ha demostrado ser una herramienta clave para democratizar el acceso a servicios financieros y mejorar la inclusión financiera en toda la región.

Lo anterior, refleja la gran acogida y expansión que ha tenido esta industria en la región, pues a medida que los emprendedores tienen la oportunidad de atender demandas insatisfechas en servicios, también están reduciendo los niveles de pobreza y estimulando el crecimiento económico. Es por esto que, a continuación, le presentamos algunas formas en las que se puede potenciar el uso de las fintech en América Latina.

Fomentar la colaboración empresas – gobierno.

Es importante que las fintech y los reguladores trabajen juntos para crear un entorno claro, legal y estable, en el que se fomente la innovación y la competencia. Igualmente, las fintech pueden colaborar con las empresas de la banca tradicional para aprovechar su fortaleza y experiencia para la áreas de cumplimiento de normas y gestión de riesgos.

Educación financiera.

La educación financiera es clave para el fomento y concientización del uso de las fintech y para ayudar a las personas a tomar mejores decisiones financieras en su vida. Pueden desempeñar un papel importante mediante la oferta de productos y servicios simples y de fácil acceso y entendimiento, así como con la promoción de educación financiera con escuelas, universidad y organizaciones sin ánimos de lucro.

Infraestructura digital.

Las Fintech están directamente ligadas con la disponibilidad de tecnología y conectividad en la región, por esto es necesario continuar trabajando en el desarrollo de infraestructura digital para mejorar el acceso a internet y por ende, a servicios financieros en todo el territorio nacional. Con soluciones de pago digital o trámites y procesos en línea se puede ayudar a mejorar la democratización de los servicios financieros.

Inversión en Fintech.

Invertir en las fintech puede ayudar a acelerar el crecimiento y la expansión de estas, para ello es necesario contar con políticas claras y estables, que incentiven a la inversión y a la creación de fondos centrados específicamente para este sector.

Protección al consumidor.

Sin duda, la protección al consumidor es clave para lograr la confianza requerida en las Fintech, es por esto que las normas deben garantizar que el usuario final esté protegido contra cualquier tipo de amenaza o fraude. Es clave trabajar en colaboración con el gobierno y la academia para que el desarrollo de soluciones protejan al consumidor y promuevan la transparencia en el sector.

El número de Fintech es mucho más grande año tras año, y lo mencionado con anterioridad es clave para lograr potenciar el uso de estas en Latinoamérica. Gracias al constante crecimiento de los últimos años, según cifras de Statista, se espera que para 2025 la cifra de uso de las Fintech supere los 380 millones de usuarios, logrando una mayor inclusión financiera necesaria en toda la región.